sábado, 1 de octubre de 2011

EVALUACIÓN ORGANIZACIONAL DE LA EXCELENCIA DOCENTE

PARTICIPANTES:
 
Andrade Mileida. Mileida_andrade@hotmail.com
Ardila Dina. Dinalar17@gmail.com
Brizuela Tania. deltabaila@hotmail.com
Méndez Norelys. norelysmendez@hotmail.com
Cordero Lydia Magdalena. magdacordero2009@hotmail.com
Villegas Vicenaibe. vicenaibe@hotmail.com

          La educación en la actualidad a nivel mundial ha sufrido cambios y transformaciones. Por lo tanto, cada individuo en el desempeño de sus funciones, adopta conductas que le son propias en diferentes situaciones y ambientes, lo que le da una característica muy particular en su forma de realizarse
     
     Nuestro sistema educativo se encuentra entre un proceso de cambio continuo y una sociedad innovadora que le exige una educación de calidad, con la finalidad de buscar los mejores resultados en beneficio de los educandos, sabiendo de que un buen resultado en el proceso educativo se verá reflejado en toda la sociedad de nuestro país.
     La calidad educativa es un propósito esencial de la política educativa, se debe tener en cuenta al alumno como sujeto en el proceso de aprendizaje, y dicho proceso deberá aplicarse a la realidad social, personal, laboral y cultural donde aprende el individuo.
     Definimos que la calidad genera la excelencia, por lo tanto, se dice haber alcanzado “una calidad” si se demuestra que en sus procesos, actividades y resultados efectivamente alcanza los criterios para la calidad.
     En definitiva, el objetivo principal de la educación, consiste precisamente en tener en cuenta el concepto de calidad como excelencia. Este último, hace mención a la perfección, capacidad extraordinaria y características sobresalientes difícil de igualar a un estudiante destacado académicamente.
     La calidad de un centro educativo dependerá, de primera instancia, de sus elementos personales; es decir, de sus profesores y alumnos. De segunda instancia, tenemos el logro de las metas y objetivos previstos propios a la actividad educativa; es decir, si el alumno aprende lo que se supone que debe aprender y lo hace con éxito.
     Una institución que atrae a los mejores estudiantes, los mejores profesores, los mejores recursos físicos y tecnológicos, por si misma es de calidad, es excelente y producirá graduados de alta calidad.
     Otra forma de pensar en un programa educativo de calidad será aquel que incluya contenidos, recursos y procesos valiosos y útiles, que respondan a los requerimientos necesarios para formar de manera integral al alumno, para preparar profesionistas excelentes, acordes con las necesidades sociales, que los provean de herramientas valiosas para la integración del individuo en forma completa a la sociedad.
     Una escuela que ofrece una educación de calidad cuando gestiona coherentemente sus recursos, sus procesos educativos, sus objetivos, sus productos y las demandas sociales.
     La calidad de la educación quedara determinada por la capacidad que tienen las instituciones para preparar al individuo, de tal manera que pueda adaptarse y contribuir al crecimiento, desarrollo económico y social mediante su incorporación al mercado laboral.
     La escuela es la responsable de crear jóvenes responsables de su obligación y con las aptitudes necesarias para desempeñar su trabajo diario la escuela tiene la obligación de proporcionar una educación de calidad para que los jóvenes y sus familias tengan la aspiración de buscar su propia superación de acuerdo a los conocimientos adquiridos en la propia institución educativa que les van a permitir ejercer una movilidad de categoría de acuerdo a su nivel cultural.
     Al establecer las metas u objetivos de los procesos de mejora de un centro educativo deben contemplarse, las necesidades de desarrollo de los miembros de toda la comunidad escolar (alumnos, profesores y padres), y no sólo estimar los cambios en función de la evaluación del rendimiento de los alumnos.
     La mejora de una institución educativa supone, necesariamente, transformar sus condiciones internas, tanto las relativas a los procesos de enseñanza/aprendizaje como aquellas otras relativa a su organización o funcionamiento. La preocupación por el clima interno del centro debe constituir un objetivo prioritario de todo programa de cambio.
     Toda transformación o cambio conlleva un proceso de planificación, implementación y evaluación a lo largo de un período de tiempo que es necesario diseñar de manera y precisa y cuidar en su ejecución, dada su incidencia sobre los resultados. Ello significa que la mejora de los centros educativos implica procesos de investigación y acción. Tenemos calidad si estamos logrando transformar la institución y sobre todo a las personas.
     Una educación de calidad será aquella que en primera instancia, capacite a los estudiantes con los conocimientos que les permitan desarrollar sus propias posibilidades para enfrentar los retos de su vida diaria; y en segunda instancia, capaces de enseñarles a los jóvenes a efectuar un aporte efectivo a la sociedad contribuyendo a un desarrollo educativo de su crecimiento y desarrollo personal y social mediante actitudes, destrezas, valores y conocimientos que lo convierten en un ciudadano útil y solidario con sus semejantes.
     Para obtener un buen resultado de la labor frente a grupo por parte de los docentes debemos de proveer y facilitar las herramientas (contenidos conceptuales, procedimentales y actitudinales) para que el proceso de enseñanza y aprendizaje sea exitoso en relación con los propósitos educativos que se tengan.
     La labor del profesor en el aula de clases es actuar como facilitador del aprendizaje, lo cual obliga al maestro a contar con un amplio conocimiento que le permita estar en condiciones de proveer al alumno de los conocimientos que en todo momento puede llegar a requerir; por tanto, es obligación moral del docente, trabajar a plena capacidad en su tarea buscando como única finalidad la educación de los jóvenes, teniendo la capacidad de proponer los cambios necesarios para que su labor fructifique en mejores condiciones, para el buen aprovechamiento de los alumnos en las aulas de clase. Cabe destacar, que un maestro debe ser un intelectual propositivo, innovador y creativo para un mejor ejercicio de su profesión.
     Un maestro debe estar al día en lo relacionado con continua labor de capacitación apoyado por las mismas instituciones educativas, para lograrlo, y de esta manera elevar la calidad y el rendimiento en las aulas escolares.
     Tanto los jóvenes, la escuela, la comunidad y los maestros deben buscar la manera de innovar su trabajo tratando de esta manera que los jóvenes estén pendientes de los conocimientos que se les imparten para que se les facilite la tarea de apropiárselos.
     Finalmente, una educación de calidad se podrá lograr cuando todos y cada uno de los involucrados participen de manera total en el cambio que se requiere llevar a cabo en el ejercicio de nuestra propia responsabilidad y realicen la función que les corresponda en el contexto del proceso enseñanza-aprendizaje de los jóvenes escolares.

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